jueves, julio 26, 2007

Pensamientos

Sueño desde luengo tiempo ha con ese momento inefable víctima de la casualidad en que el espíritu exulta por razones aparentemente nimias. Voy navegando por este océano inexpugnable que lleva mi barca por ignotas islas; por paisajes remotos.

A pesar de las tempestades que azotan mi endeble embarcación, estoy cierto que puedo ser capaz de navegar aún en medio de vientos huracanados. Ese agreste clima que han dejado los ciclones a su paso por mi historia, me pesa y hay días que quisiera detenerme en el primer puerto disponible; mas sé que hay que continuar navegando porque presiento que pronto, muy pronto, volverá el sol con su fulgor a iluminar mi horizonte.

No importa que hoy no haya sido el día esperado. Sé que llegará, un día de estos llegará por el rumbo menos esperado.

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