No cabe duda que las mascotas son una fuente de tranquilidad y compañía para las personas que vivimos solas.
Desde hace más de diez años, he tenido la fortuna de gozar de la compañía de un conejo o de un cuyo; o como actualmente sucede: de conejos y cuyos.
Aunque ha habido momentos en los que debido a mis problemas emocionales los he dejado un poco de lado, siempre permanecen a mi lado, brindándome esa paz y calma que tanto necesito a veces.
Nunca dejaré de admirar a los mamíferos: su entrega, su dedicación hacia sus crías, su ternura. Si hay algo noble y digno de admirarse en este mundo son definitivamente los animales. Inocentes víctimas de la depredación inconciente y salvaje de nuestra especie.
Desde hace más de diez años, he tenido la fortuna de gozar de la compañía de un conejo o de un cuyo; o como actualmente sucede: de conejos y cuyos.
Aunque ha habido momentos en los que debido a mis problemas emocionales los he dejado un poco de lado, siempre permanecen a mi lado, brindándome esa paz y calma que tanto necesito a veces.
Nunca dejaré de admirar a los mamíferos: su entrega, su dedicación hacia sus crías, su ternura. Si hay algo noble y digno de admirarse en este mundo son definitivamente los animales. Inocentes víctimas de la depredación inconciente y salvaje de nuestra especie.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario